Los sapos como las víboras, escorpiones, cuervos y gatos negros, están tradicionalmente considerados como malos augurios, como atestigua el siguiente relato.
UN MITO AFRICANO ACERCA DE UN SAPO.
En un día en el que era difícil encontrar agua, el Hombre se detuvo un instante a pensar y dedujo que tal vez algún día moriría, para nunca regresar. El Hombre envió al Perro hasta Dios, a preguntarle si podría volver a la vida, como las plantas que florecen, una vez muerto.
El Perro partió hacia Dios, con su nariz como guía. Pronto se distrajo con el olor de una sopa, y su hambre hizo que lo rastreara hasta su origen. El Perro se acerco a verla hervir y contento, se olvido de su misión.
Al ver que el Perro se había perdido, el Sapo decidió ser él quien llegara antes Dios para decirle que el Hombre no quería volver a vivir. Si el Hombre renaciera, pensó el Sapo, pronto embarraría los ríos y destruiría los lugares donde nacen los sapos.
Finalmente el Perro llego ante Dios y le transmitió el mensaje del Hombre. Con una canción en su aullido, le contó acerca de la necesidad del Hombre por renacer. Dios se conmovió con la devoción del Perro hacia el hombre.
Pero Dios le cumplió el deseo al Sapo, porque llego primero.
[ Hellboy: Semilla de Destrucción ]